Balestrand es el lugar en el que se inicia el Fiordo de los Sueños, o visto desde el mar, el lugar en el que el fiordo penetra más en la tierra. Es un pueblo encantador, de casas típicamente nórdicas. Históricamente ha sido utilizado por los noruegos como centro de vacaciones estivales, sobre todo el hotel Kvikne, en manos de la misma familia desde finales del siglo XIX, que ha albergado desde entonces a distintos regios personajes, entre los que destacaron el Kaiser Guillermo antes de la Primera Guerra Mundial, al que siguieron emperadores, reyes, presidentes, primeros ministros, estrellas del celuloide y numerosos artistas internacionales.
La fotografía que hoy comparto es precisamente de esas preciosas casitas noruegas que jalonan todo el paisaje que bordea el fiordo.